APUNTES DE UNA ADICCIÓN
Como venía siendo costumbre y fiel a su desastrosa manera de afrontar las cosas cogió el chato vacío y volcó el contenido de la botella que había encima de la mesa en su interior. La misma botella que días antes depositara en ese preciso espacio y que ahora, recordando el instante, le miraba por encima de las tazas y vasos, de los platos y ollas, mostrándole el desorden, incitándole a beber.
PD: Con el primer sorbo sus miembros se relajaron, con el segundo pudo respirar. Al tercero ya era otra persona… luego del cuarto se puso a llorar.
PD: Con el primer sorbo sus miembros se relajaron, con el segundo pudo respirar. Al tercero ya era otra persona… luego del cuarto se puso a llorar.

1 comentario:
El caso es que me costó un rato darme cuenta de quien eras. Luego me vi envuelto en un par de exámenes (bien, gracias) y demoré mi respuesta, pero ya hace unos días que quería hacerlo.
Sabe que estoy impresionado por tu escritura. ¡No te hacía yo esta faceta! Nunca dejas de sorprenderme, F.
Me alegro de que te haya gustado encontrar mi blog. Me hace ilusión que te haga ilusión.
Y la amistad está ahí, esperando a algún verano en el río, o similar, para retomarla donde la dejamos, intacta.
Un abrazo
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